sábado, 7 de enero de 2017







SILENCIO

-Cartel del film-

Desde que la historia de la humanidad es Historia, desde que quedó constancia del pensamiento y el conocimiento humano, las ideologías y creencias en general, las políticas y religiones, han pretendido imponerse a la sociedad como poseedoras de la verdad…

La imposición inquisitorial de un pensamiento único, de una pretendida verdad única, política o religiosa, no es nada nueva…

La historia de la humanidad, desafortunadamente está plagada de terribles y cruentas inquisiciones…

En el siglo XVII, una de ellas, fue la de la intolerante persecución, tortura y terrible ejecución de los cristianos en Japón, por sus creencias religiosas, diferentes a las imperantes en el país…

Es el tema que tratan, de manera denotativa y muy impactante, la novela historicista Silencio, del prestigioso escritor japonés Shusaku Endo y el filme homónimo del conocido cineasta neoyorquino Martin Scorsese..

Connotativamente, de manera más profunda y sutil, tanto la obra literaria original como el filme, tratan el tema más universal, misterioso e inexplicable, como es el silencio de Dios -para los creyentes de todas las religiones-, ante el sentido del sufrimiento humano, tantas veces impuesto inquisitorialmente por las ideologías y doctrinas políticas y religiosas…

La obra Silencio, del novelista católico Endo, fue ya conocida por Scorsese, al realizar su controvertido filme La última tentación de Cristo -basado en la polémica obra del escritor griego Nikos Kazantzakis, considerado uno de los filósofos más importantes del siglo XX-, en la que también se trata el silencio de Dios, ante el sufrimiento y muerte de Cristo.

Shusaku Endo y su novela Silencio.

El escritor japonés Shusaku Endo -novelista, dramaturgo, guionista y biógrafo-, fue considerado por Graham Greene como uno de los principales literatos universales del siglo XX.

Aunque nació y vivió en Japón, en los inicios de la década de los años veinte, su formación universitaria en Literatura Francesa en la Universidad de Lyon, le harían conocedor de las culturas occidental y oriental. Educado por su madre en el catolicismo, pronto se identificó, desde la adolescencia, con la moral cristiana, siendo ésta la preocupación central de su vida y su obra -en la que trata complejos problemas culturales y morales-.

Junto a su magistral obra historicista Silencio, su novela más conocida y divulgada, destacan sus obras, también de carácter historicista: Escándalo, Jesucristo, El Samurái, Río profundo…, por las que ha sido distinguido con los más importantes reconocimientos y premios literarios de Japón.

El 16 de marzo de 2012, al referirnos a su último filme La invención de Hugo, recordamos, en nuestra web, ya reseñábamos que Martín Scorsese, actor, guionista, director y productor norteamericano, al ser niño de naturaleza débil y enfermiza, se refugió con frecuencia en las salas de cine, lo que fue determinando su espíritu imaginativo y ensoñador; en sus años jóvenes tuvo la intención de ordenarse sacerdote -dato importante que determinaría la preocupación por los valores éticos y morales de su cine y títulos como La última tentación de Cristo, y ahora Silencio-, pero su amor y vocación por la Fábrica de Sueños, por el Cine, pudo mucho más…
Descendiente de inmigrantes obreros italianos, sus padres -quienes intervendrían, al igual que él, en papeles secundarios, en muchos de sus filmes-, fueron los inspiradores de su primer filme documental Italianamerican.
A este seguirían más de setenta filmes, en sus diferentes facetas de cineasta -siendo destacables títulos como: Vidas al límite, La edad de la inocencia, Historias de Nueva York: Lecciones de vida, El color del dinero, Toro salvaje, El último vals, Taxi driver, Malas calles…- , con los que obtuvo los reconocimientos y galardones más importantes del Séptimo Arte.
Junto a otros cineastas, promovió la Fundación Mundial del Cine, que se preocupa por la preservación y conservación del material fílmico importante. Hoy, es uno de los grandes directores del cine mundial, a quien se le suele vincular a las corrientes cinematográficas del Realismo Social Norteamericano, o Cine de Transformación Social, como se le denominó en anteriores décadas.

Martín Scorsese, director de La última tentación de Cristo y Silencio.

Aunque se pudiera pensar que Silencio -al tratar, entre otros temas humanos, el de la apostasía religiosa de unos misioneros en el siglo XVII-, es un tema anacrónico, dadas las apostasías de hoy y el alejamiento de las religiones, aunque por motivos diferentes, alegóricamente el filme es de plena actualidad.

Si en la Edades Media y Moderna, fueron las inquisiciones, las torturas físicas y el sufrimiento, motivos de las apostasías; hoy el sufrimiento moral, el mayor conocimiento científico, el persistente enigma de Dios, una nueva moral con mayor sentido común y razón de ser…, determinan las apostasías actuales y alejamiento de las religiosidades tradicionales…

Dados el extraordinario prestigio y la fama universal alcanzada, de la novela historicista Silencio de Endo -inspirada en la historia real del jesuita misionero portugués Cristóbal Ferreira, que apostató del cristianismo y se hizo miembro del budismo Zen, entregándose, obligada o libremente, como redención, a la filosofía natural o sabiduría del sentido común-, se han realizado adaptaciones a otros medios expresivos: en 1971, el director japonés Masahiro Shinoda, la llevó al cine en su filme Chinmoku; en el 2000, el compositor Teizo Matsumura, puso en escena su ópera homónima; en el 2002, la obra inspiró al compositor escocés James Macmillan su Sinfonía nº 3

No es de extrañar, por tanto, que el proyecto de realizar un nuevo filme sobre el tema del silencio de Dios ante el sufrimiento humano, de la apostasía y la redención, de Martín Scorsese -cineasta de gran sensibilidad hacia temas universales de interés moral y religioso, como hemos referido-, persistiera en él durante décadas, tras realizar La última tentación de Cristo

Sobre el impactante filme, inspirado en la historia del misionero católico jesuita Cristóbal Ferreira y en la novela de Shusaku Endo, dado el interés que ha suscitado, se ha escrito mucho en medios católicos y no católicos -a pesar de que la apostasía se considera un tema de conciencia personal, impenetrable…- Acaso con intención de evitar distorsionadas controversias y polémicas, en noviembre pasado, el filme fue presentado por Scorsese al Papa Francisco, quién parece ser ya conocía la novela…

Scorsese en la presentación al Papa jesuita Francisco, el filme Silencio.

Controversias y polémicas aparte, lo cierto y verdad es que, Silencio es un filme de extraordinarios valores artísticos y humanistas, de interés general; otra gran realización de Scorsese, que a muy pocos dejará indiferente…

Francisco Montero.