LA ULTIMA SESION DE FREUD
-Cartel original del film.-
Hoy que el psicoanálsis de Sigmud Freud y el cristianismo de C.S. Lewis -portentosas figuras antagónicas de la historia- están cuestionados por la razón y la fe, la ciencia y la religión; al ser la temática discursiva esencial, del filme, La última sesión de Freud, éste resulta de sumo interés.
En estos cruciales momentos en que los jinetes del apocalipsis -la guerra, el hambre, la enfermedad y la muerte-, y también el sentido de la vida, así como la vida sin sentido, se ciernen sobre Ucrania y Palestina, el filme, que en su trasfondo trata también citadas cuestiones sobre las guerras, provoca un profunda reflexión.
Basado en la exitosa obra de teatro de ficción historicista La última sesión de Freud, de Mark St. Germain, y ésta en el relato literario La cuestión de Dios, de Armand M. Ncholi, el filme de Matt Brown, auna múltiple atractivo y valor…
El neoyorquino Armand Mayo Nicholi, psiquiatra en el Hospital General de Massachussets y profesor en la Universidad de Harvard, adquirió reconocimiento, prestigio y popularidad por sus trabajos sobre la educación emocional en la infancia y la juventud y por un curso sobre La cuestión de Dios. C.S Lewis y Sigmund Freud, que impartió en esa Universidad, durante más de una treintena de años. De esa experiencia escribiría el libro La cuestión de Dios…
En ese libro Nicholi realiza una interesante confrontación entre la fe y la razón -o la ciencia-, y más concretamente sobre la confrontación y el pensamiento, acerca de Dios, el Amor, el Sexo y el Sentido de la vida, de los famosos y contradictorios personajes: C.S. Lewis -religioso, creyente- y Sigmund Freud -psiquiatra, ateo-,
El lbro, traducido a diversos idiomas, en su edición al español y publicado por Rialp, hoy es difícil encontrar.
Armand M. Nicholi y su libro.
El relato literario de Nicholi y sus conocimientos sobre el tema darían pie a una serie televisiva del Servicio de Radiodifusión Pública PBS, siendo también llevados al teatro por Mark St. Germain y otros dramaturgos.
Según sus entrevistadores, estudioso y conocedor de las teorías y opiniones de Lewis y Freud, sobre Dios, el Amor, el Sexo y el Sentido de la vida, Nicholi, ya en sus cursos universitarios y en su libro La cuestión de Dios, trató y relató las claves discursivas principales del antagonismo y la confrontación entre ambos personajes. Claves de interés social que, posteriormente, serían llevadas al teatro, por Germain, y al cine, por Brown.
Nicholi, en sus opiniones a entrevistadores sobre ambas celebridades, ha dudado de la rotundidad científica del psicoanálisis y de las teorías de Freud, argumentando: que éste atribuía a toda la sociedad las investigaciones que realizaba sobre sus pacientes enfermos; pero que sí acepta -por sus propias investigaciones personales- que las vivencias y experiencias en los primeros años de la vida, influyen, posteriormente, en la conducta de la persona adulta.
Sobre el ateísmo del científico y su increencia sobre la existencia de una moral universal, indica Nicholi, que Freud no aportó al conocimiento social ninguna prueba fehaciente de la inexitencia de Dios, ni de la inexistencia de esa moral.
Sin embargo, considera muy razonables las teorías del prestigioso profesor de Oxford, C.S. Lewis, sobre la existencia de una moral universal y la existencia de una Inteligencia Superior -su concepto de Dios-, como prueban el cosmos y el universo galáctico… Igualmente, Nicholi, estima muy acertadas las tesis de Lewis, sobre los primeros años de la vida; y la moral sobre el bien y el mal, manifestada a través de sus famosas historias juveniles Las Crónicas de Narnia, heptalogía o serie de siete libros, también llevados al cine.
Efectuamos citadas extrapolaciones porque, en definitiva, configuran la trama discursiva de La última sesión de Freud, obra teatral y filme, homónimos, del dramaturgo Germain y del cineasta Brown…
Mark St. Germain -dramaturgo- y Matthew Brown -cineasta-.
El estadounidense, escritor, dramaturgo y guionista de cine y televisión. Mark St Germain, autor del guión fílmico de La última sesión de Freud, basado en su obra teatral homónima, debe su popularidad a ser autor de teatro, en el que, con una decena de obras escritas, ha alcanzado notable reconocimiento y prestigio.
Germain tiene predilección por el teatro de ficción historicista, y en las claves propias de ese género ha escrito sus obras mas destacadas.
Suele basar sus dramatizaciones en relatos literarios exitosos de otros autores, sobre personajes históricos populares o famosos como: Ann Atwater -activista estadounidense defensora de los derechos de los negros-; Karola Ruth -socióloga alemana huida de los nazis, exploradora, madre soltera y, finalmente, terapeuta experta en sexo en programas televisivos-; o C.S. Lewis y Sigmund Freud -antagónicos personajes históricos en temas de religión y ciencia-…
Las obras de Germain suelen tener gran éxito en los circuitos teatrales minoritarios de Estados Unidos, ajenos y diferentes a los grandes escenarios de Broadway y sus grandilocuentes espectáculos. El autor ha sido distinguido con los premios de: Círculo de Críticos del Teatro, Gremio de Dramaturgos, “Los Diez Mejores del Año” de la revista Time, entre otros…
Con ser su guionista dramaturgo y ser el filme una adaptación de su obra teatral a La última sesión de Freud, salvo contadas secuencias, los amantes del arte dramático, lo consideran como teatro filmado.
Aludiendo al confrontado diálogo de sus personajes protagonistas, Freud y Lewis, sobre el bien y el mal, los jinetes del Apocalipsis de la Primera Guerra Nundial, y en las vísperas de la Segunda, configuran las escenas más cinematográficas del filme, distanciándole del teatro y provocando la reflexión sobre las absurdas guerras de ayer y de hoy, carentes de humanismo…
Significativa escena bélica del filme con intencionalidad moral.
Impresionan las expresivas, acertadas y magistrales actuaciones de sus protagonistas Anthony Hopkins -Sigmund Freud, ateo sin ningún asidero de fe, en los duros momentos finales de su vida- y Matthew Goode -C.S. Lewis, con su filosofía de creyente convencido de la existencia de Dios-, en este filme rico en primeros planos introspectivos y de difícil interpretación.
La última sesión de Freud es, sin duda, un Filme de Actor, resultando acertada y loable la elección de sus protagonistas por Matt Brown, su director.
Al definirse el filme como Cine de Actor, y que su trama se centre principalmente en el encuentro entre los personajes de Freud y Lewis, su director y guionista reparan también, de manera destacada, en el personaje de Anna, hija de Freud, interpretado por la actriz Liv Lisa Fries.
Anna, quien en la realidad acompañó a Freud hasta su muerte, heredó las teorías paternas del psicoanálisis, prosiguiendo sus investigaciones, y por las que seria considerada “Madre del Psicoanálisis”.
Mujer de personalidad muy compleja, ella misma fue paciente de su padre, quien la llamó Anna Antígona, atribuyéndole el mito edípico…; cuestiones éstas acaso poco tratadas en el sugerente e interesante filme humanista…
Francisco Montero.