EL VIENTO SE LEVANTA
-Cartel del film- |
España, mundialmente reconocido, siempre ha sido un país de grandes pintores, ilustradores, cineastas animadores…
Y José Ramón Sánchez, sin lugar a dudas, ha sido y es el polifacético y gran humanista español de la pintura, la ilustración de libros, la realización de cine de dibujos animados para niños…
Recordemos su extraordinaria obra pictórica e ilustradora de libros: El Quijote, La Biblia, Nijinski y los ballets rusos, La gran Aventura del Cine, 50 Años del Cine Español, El Siglo del Cine, Moby Dick, La Divina Comedia, El taller de los maestros, Cuando el abuelo fue niño…; sus dibujos en los pioneros Estudios Moro, su filmes de animación: Pablito -sobre la infancia de Pablo Picasso-, El desván de la fantasía…
Nuestra amistad, y mi admiración por la obra de José Ramón -que me desveló y familiarizó con los inefables entresijos de la fantasía y la magia del cine de animación-, me indujo a una especial atención por el Arte de Artes de los Dibujos Animados, en el que ha confluido el mejor humanismo de todas las bellas artes, y de manera muy particular el de la literatura.
Motivados por la cautivadora magia y el enamoradizo “duende” de la polifacética y prolífica obra del genial autor José Ramón Sánchez, multitud de cinéfilos nacionales e internacionales, han sido atraídos al fascinante mundo -¡milagroso elixir de la permanente infancia y juventud…!- de los dibujos animados…
Méliès el Mago, pintura e ilustración de José Ramón Sánchez para su obra El Siglo del Cine. |
En el olimpo del apasionante universo de los dibujos animados, junto a pioneros y realizadores, como: Quirino Cristiani, Manuel García Ferré, Walt Disney -y tantos otros…- no podía faltar el gran maestro del cine de animación y manga japonés -man, hombre y ga, dibujo-, Hayao Miyazaki, autor de El viento se levanta…
Con una decena de largometrajes de animación para el cine, otras tantas series de dibujos animados para televisión y una cincuentena de los más importantes reconocimientos cinematográficos -entre premios y nominaciones- por su obra, Miyazaki, es, sin duda, uno de los grandes genios internacionales de la Historia del Cine de Animación.
Desde que cautivara al mundo con su trabajo, en las populares y conocidas, por humanistas y naturalistas, series televisivas de Heidi y Marco, Miyazaki ha escalado una fulgurante y exitosa carrera, prácticamente, en todos los roles del cine de animación -dibujante, guionista, productor…-; creando además, junto a Isao Takahata, los famosos estudios japoneses de animación Ghibli.
Ghibli, cuya palabra y fonética japonesa alude a “soplo de viento”, tuvo connotaciones desde su creación, en alegóricas intenciones de insuflar un nuevo aire creativo al cine de animación.
Indudablemente, con filmes de extraordinaria diversidad temática, Miyazaki, ha aireado a nivel mundial, con la originalidad y frescura propias del anime y el manga japonés, el cine de dibujos animados.
Por citadas originalidad y frescura, en su filmografía destacan los títulos: Nausicaä del Valle del viento (1984), El castillo en el cielo (1986), Mi vecino Totoro (1988), La princesa Mononoke (1997), El viaje de Chihiro (2001), llegando su consagración definitiva como genial creador del cine de animación con el filme que se reseña El viento se levanta (2013).
Por los valores creativos, artísticos y humanos, sus filmes han sido premiados, entre otros, con los máximos reconocimientos cinematográficos de: la Academia Japonesa del Cine, la Academia Inglesa -Premio BAFTA-, la Academia Francesa -Premio César-, en el Festival Internacional de Cine de Venecia -León de Oro a la Mejor Carrera-, en el Festival Internacional de Berlín -Oso de Oro a la Mejor Película-, el Festival Asiático de Cine de Mainichi, en los Estados Unidos -Premio de la Asociación de Críticos de Cine, Premio Satellite, Premio Annie, Oscar Honorífico-…
Expresivo autorretrato de Hayao Miyazaki. |
Los filmes de Miyazaki, no sólo deleitan por su belleza sino que plantean a los pequeños, jóvenes y mayores, sencillas pero enjundiosas reflexiones acerca de los valores humanos, espirituales, sentimentales, sobrenaturales y naturales como: la superación de las dificultades, la trascendencia de nuestros actos, la solidaridad, el esfuerzo, el sacrificio, el amor y el respeto a la naturaleza…
Buena parte del humanismo de la última obra de Hayao Miyazaki, está, sin duda, inspirado en la aleccionadora filosofía del genio de la poesía pura, como fue Paul Valery; emotivo autor que en su poema El cementerio marino, intentaba despertar los ánimos caídos con sus sugestivos versos, de los que se hizo célebre: ”El viento se levanta!... ¡Tratemos de vivir!"...
Significativa expresión ésta que ha dado título e inspirado el contenido del filme de Miyazaki.
El viento se levanta no es una historia animada infantil; es un filme junior, inspirado en la historia familiar del propio padre de Hayao Miyazaki, que trata paralelamente la historia de la evolución y el progreso de la aviación japonesa, a través de la investigación y el trabajo de un joven y talentoso ingeniero aeronáutico…
Katsuji Miyazaki, padre de Hayao, fue constructor de timones para aviones de combate en su fábrica Miyazaki Airplane… Su madre, Dola Miyazaki, siendo él niño, enfermó de tuberculosis y tras largo y penoso padecimiento murió, unos años después de que el joven se graduara en ciencias políticas y economía, formación que no ejerció por dedicarse a los dibujos por influencia de su tío el dibujante Tezuka Miyazaki…
La joven pintora Nahoko y Jiro el ingeniero aeronáutico, protagonistas del filme. |
Por citada experiencia y vivencias familiares, y basándose en la novela del escritor japonés Tatsuo Hori, El viento se levanta nos narra la historia de un joven ingeniero aeronáutico Jiro Horikoshi, -que sueña con volar pero no puede por su miopía, soñando también con trasladar los logros de la aviación de guerra a la aviación civil-, y su romántica y sacrificada relación con la joven pintora Nahoko Satoni, que enferma de tuberculosis…
El filme, es una hermosa y romántica alegoría sobre el mundo de las aspiraciones y los sueños humanos, que tantas veces se truncan en la vida; pero que, a pesar de ello, hay que sacar el mejor provecho y disfrute de las circunstancias adversas e inclementes… Es la poética filosofía de Paul Valery -reflejada en la novela de Tatsuo Hori-: ¡Tratemos de vivir!...
El viento se levanta, como la mayoría de la obra de Miyazaki, ha pasado casi desapercibida, tarde y con más pena que gloria por las pantallas de nuestro país…
Afortunadamente, sus mejores filmes podemos encontrarlos en dvd.
Francisco Montero.