ALCARRÀS
-Cartel del film.-
La vida rural despoblada o vaciada -en nuestro país “la España vaciada”-, en muchos lugares del planeta está siendo un grave problema por el abandono de infinidad de recursos naturales, medios de vida tradicionales, bienestar, felicidad…
Ahora, se está descubriendo el error; para las gentes del terruño, la vida en grandes urbes, desnaturalizada y artificiosa no es una solución satisfactoria de bienestar y felicidad…
En esencia, de ello trata el filme Alcarràs, de la cineasta catalana Carla Simón, premiado con el Oso de Oro en la última Berlinale, Festival Internacional de Cine de Alemania.
-Afortunadamente, para nuevos medios y formas de vida, se están encontrando soluciones al problema…-
El filme Alcarràs, toma su título homónimo del municipio leridano-catalán, en el que se ubica y desarrolla su historia de dejación obligada del cultivo de melocotoneros, del que una familia, para instalación de placas solares, es desterrada…
Es un filme que nos rememora el expresivo poema Desterrado, del albaceteño José Mª Blanc Garrido, publicado por la Revista Manxa (1986) de la Universidad de Castilla-La Macha y que hoy, premonitoriamente, aún puede encontrase en internet: “Vengo de antigua sangre labradora;/ con orgullo lo anuncio y lo proclamo:/ la luz del sol mi pecho condecora,/ de tierra vengo y labrador me llamo./ Dondequiera que extienda la mirada,/ se me llena de campo y claridades,/ aunque la tenga toda acorralada,/ por ladrillos, cementos y ciudades;/ dondequiera que viva desterrado, vuelvo a beber el agua de mis fuentes;/ vuelvo a pisar las sendas que he pisado, me pueblo de raíces y simientes:/ la tierra entera el corazón me grita,/ la tierra, ausente, en soledad me llora/ y cuando digo “tierra” me tirita/ toda esta vieja carne labradora…”
Alcarràs es un filme que, aunque se localice en éste pueblo leridano, en el fondo, trata un problema mundial de destierro, muy generalizado, por lo que en la última Berlinale, su directora Carla Simón fue premiada con el citado máximo galardón del Oso de Oro a la Mejor Película…
Carla Simón recibe el Oso de Oro por su filme Alcarràs.
La guionista y realizadora catalana (Barcelona, 1986), Carla Simón Pipó, con sólo dos largometrajes en su historial, Verano 1993 y Alcarràs, ha alcanzado un extraordinario reconocimiento y prestigio internacional como cineasta.
A los seis años quedó huérfana de padres y fue a vivir con su tíos y una prima, menor que ella, al pequeño municipio Las planas, en la comarca gerundense de la Garrocha, cuyas vivencias infantiles en el lugar motivaron su primer filme Verano 1993.
Con este primer bello filme, de carácter autobiográfico, seleccionado por la Academia de las Ciencias y Artes Cinematograficas de España en 2017 para representar a nuestro país en los Oscars -y que puede visionarse aún, gratuitamente, en internet en el programa “Somos Cine” de Radio Televisión Española-, Simón Pipó, obtuvo importantes reconocimientos.
El guión de Verano 1993, también tuvo antes de su filmación importantes reconocimientos y fue seleccionado: en el Taller de Guiones de la Sociedad General de Autores Españoles, en el Taller de Desarrollo de Guiones de Media Sources 2 del Programa de Europa Creativa Media, en el Talent Campus de la Estación de Guiones de la Berlinale…
El filme, posteriormente (2017-18), obtuvo más de una docena de importantes premios y reconocimientos, entre los que destacan: Mejor Ópera Prima y Premio del Jurado en el Festival Internacional de Cine de Berlín, Premio del Público al Cine Latino en Tubinga, Premio al Mejor Guión Juniors en Cannes, Mejor Película en el Festival de Cine de Odesa, Premio del Jurado en el Festival de Cine de Estambul, Biznaga de Oro a la Mejor Película en el Festival de Cine de Málaga, Premio ASECAN, de la Asociación de Escritores de Cine de Andalucía…
Anteriores a sus largometrajes, Carla Simón realizó seis cortos, de carácter experimental y documental, en Estados Unidos, Inglaterra y España, lugares donde complementó su formación cinematográfica y televisiva úniversitaria de Comunicación Audiovisual.
Todas las realizaciones de Simón Pipó, junto a su acusada sensibilidad y sugerencia poética, tienen un marcado realismo humanista, que se acentúa en las interpretaciones no profesionales de los actores de Alcarràs…
Anna Otín y Jordi Pujol, protagonistas no profesionales de Alcarràs.
El género del Realismo Cinematográfico, desde que se implantaron en Europa los valores humanos y sociales del Neorrealismo Italiano, es una manera original, sui generis, de hacer cine, muy apreciada en nuestros países continentales de occidente, a la que deben su éxito los filmes de la cineasta.
Simón Pipó, en su filme Alcarrás, extrema ese realismo, hasta el punto de seleccionar para su reparto de actores, a protagonistas no profesionales y lugareños, muy identificados con las vivencias humanas y sociales de los temas que trata.
Al igual que en el filme Verano 1993, Carla Simón trataba auotobiograficamente, recuerdos personales de su infancia, en Alcarràs, filme coguionizado con Arnau Vilaró, hijo de agricultores leridanos, se tratan también, de manera muy realista, recuerdos y vivencias, al parecer personales, de éste cineasta…
Arnau Vilaró, quien ya trabajó con Carla Simón en Verano 1993, es un prestigioso teórico del cine, profesor universitario, guionista y ensayista, autor del libro La caricia del cine…
Vilaró, como reseña en su historial, es profesor de estudios de cine en la Universidad Autonoma de Barcelona, en la Universidad Abierta de Cataluña y en la Escuela Superior de Cine y Audiovisuales de Cataluña, habiendo desarrollado su doctorado en la Nueva Sorbona de París y en el Insituto de Investigaciones Esteticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, siendo especialista en Historia y Estética del Cine Francés, sobre el que ha realizado una importante labor divulgativa en diferentes medios de comunicación y revistas…
Arnau Vilaró, coguionista del filme Alcarràs.
A Vilaró, como hijo de agricultores, se deberán, por tanto, diferentes aspectos realistas y bien documentados acerca de las vivencias de la desterrada familia Solé de Alcarràs, a la que desahucian de su cultivo de melocotoneros, su medio habitual de vida…
Acaso en función de su realismo, en los medios promocionales del filme, se argumenta que es la primera película rodada íntegramente en catalán que ha ganado la Berlinale. Aunque es sabido que los pensamientos, sentimientos y vivencias se expresan mejor en la lengua materna, cuanto más generalizado sea el lenguaje de un filme, es claro tendrá menos problemas de doblaje y comunicación. Afortunadamente, el lenguaje de la imagen es universal…
Francisco Montero.