jueves, 12 de julio de 2012

LA DELICADEZA

-Cartel español-

Vivimos una sociedad y un mundo escandalosamente sofisticados. Ni nada ni nadie, salvo excepciones, son lo que aparentan ser: ni las ideologías, ni los políticos…; ni las religiones, ni las iglesias…; ni las sociedades, ni las personas…
Indudablemente, la crisis actual tiene mucho que ver con la falta de los valores esenciales de la verdad, la bondad, la belleza
El prototípico personaje “Don Juan”, falso, prepotente, burlador, libertino, sin escrúpulos y sin ningún respeto a los valores humanos y sociales -tantas veces llevado a la literatura y el arte, por grandes autores como Molière, Mozart, Lord Byron, Zorrilla…-, se ha apoderado del pensamiento social occidental y ha contribuido sobremanera al denigrante mundo que tenemos…
Entre la ciudadanía de cualquiera de nuestras desarrolladas sociedades occidentales, entre las gentes con más sentido común, más lógica y más sencillez, se escucha con frecuencia la frase: “Se han perdido el respeto y los buenos modales… -la naturalidad, la sinceridad, la delicadeza…”

Pues bien, sobre referidos aspectos, ha reflexionado con gran acierto el escritor David Foenkinos, tratando la antitesis de referida temática, en la novela original y en el filme homónimo que se reseña, codirigido junto a su hermano Stéphane, y que van camino de convertirse en las obras más exitosas y aplaudidas del momento.

David Foenkinos, novelista y guionista de La delicadeza

David Foenkinos, alternó sus estudios de Letras en la Sorbona con su dedicación a la música de jazz. Admirador del célebre escritor y músico checo-francés Milan Kundera, pronto decantó su vocación por la nueva literatura romántica, centrando su temática en las relaciones amorosas de pareja. Entre sus novelas -de sencilla trama sentimental y humorística-, destacan: En caso de felicidad, Nuestras separaciones, Los recuerdos…, y últimamente La delicadeza, que ha logrado una decena de premios literarios en Francia y se ha editado en una quincena de países, convirtiéndose en uno de los éxitos literarios del momento.

Acaso atendiendo a sus propias vivencias personales, La delicadeza, es la antítesis del conocido personaje “Don Juan” -libertino, conquistador, sin escrúpulos…-; es la historia de un antihéroe, físicamente poco atractivo, pero con los excepcionales valores morales de la bondad, la sinceridad, la naturalidad… Con ellos transforma, conquista y hace renacer a la joven protagonista, decepcionada y hundida por la brutalidad de la vida… Lo sutil de La delicadeza, es que en ella no hay personajes conquistadores, son los nobles y buenos sentimientos, los que conquistan a los personajes. Con su sencilla pero sugerente novela, Foenkinos, desmitifica a los donjuanescos triunfadores, a los sofisticados y falaces héroes y heroínas del amor loco, apasionado, ligero… “Da la vuelta” a la mayoría de los tópicos en los que se basan las relaciones amorosas y sentimentales de hoy…

Stéphane Foenkinos, François Damiens, Audrey Tautou y David Foenkinos, en la presentación del filme.

El cineasta Stéphane Foenkinos, director de casting, realizador y guionista, es, junto a su hermano David -escritor de la novela-, el artífice de la acertada puesta en imágenes de la obra La delicadeza.
Su familiarización con el cine de la “nouvelle vague” francesa es evidente -habiendo trabajado para algunos de sus más destacados maestros como Godard y Chabrol-. Muchas escenas de La delicadeza, su obra primera como realizador, rememoran momentos mágicos del que fuera joven, renovador y romántico, movimiento cinematográfico francés y europeo.
En La delicadeza, no sólo hay alusiones a escenas mágicas del cine francés, sino también de la historia del cine mundial. Es emocionante y sugestiva su alusión a la inolvidable y mítica escena de Cantando bajo la lluvia -cuando el protagonista, bajo una lluvia torrencial y un paraguas con el que no se cubre, canta “empapado de enamoramiento”-; en La delicadeza, bajo un diluvio a mares y un chaquetón que no les cubre, también se poetizará el empapamiento de amor de sus protagonistas…
Stéphane, tras estudiar inglés, se dedicó profesionalmente a la dirección de casting, en cuya labor de selección y dirección de actores, ha trabajado junto a grandes cineastas como Jacques Doillón, André Téchiné, Jean-Luc Godard, Claude Chabrol, Wody Allen…; contando en esta trayectoria con más de una treintena de filmes.
Su experiencia en la elección de actores, resulta contundente en la acertada elección de los protagonistas de La delicadeza: Audrey Tautou -Nathalie- y François Damiens -Markus-. De sus respectivas caracterizaciones, no sería aventurado decir que apenas si han tenido que interpretar…

Nathalie y Markus, personajes del filme

Autrey Tautou, protagonista de La delicadeza, actriz de aparente naturaleza frágil, pero fuerte carácter, es el contrapunto del filme de Foenkinos. Podría decirse -y en ello estriba parte de la clave humorística de la historia romántica- que, el celebérrimo Don Juan de nuestra cultura occidental, en este filme es una conquistadora “Doña Juanita”; nuestros tópicos sociales vueltos de revés, con cierto sentido aleccionador para los tiempos de hoy…
Tautou, actriz y modelo, saltó a la fama mundial por su papel en la película Amélie, por la que obtuvo una decena de importantes reconocimientos y premios por su interpretación. Cuenta en su historial con más de una veintena de filmes protagonizados, entre los que -además del último citado- destacan: Bienvenidos a la belleza, Largo domingo de noviazgo, Un engaño de lujo, El código Da Vinci, Coco antes de Chanel
Como modelo -a cuya faceta debe también mucha fama y popularidad-, ha posado para prestigiosas revistas como Elle, Vogue, Harpers Bazaar… y ha sido imagen publicitaria de Chanel, L’Oreal, Montblanc
Fama y popularidad que se han aprovechado para ilustrar también con su imagen la portada de la novela en la que se basa el filme.

Los consabidos efectos asociativos de la publicidad, es indudable, han transferido a la novela y al filme, buena parte del carisma, la fama y popularidad de Audrey Tautou.

François Damiens, Markus en el filme

Aunque en el filme destaque principalmente el lucimiento de Audrey Tautou, el protagonista esencial de su trama es François Damiens.
Damiens, en el papel de Markus, reiteramos, caracteriza con una naturalidad genial la clave de la delicadeza. Es la total negación del Don Juan, del triunfador y sus malas artes, el antihéroe, el tímido físicamente poco agraciado… Pero con una bondad natural, impropia de estos tiempos… Aunque él es incapaz de conquistar a nadie, serán sus sinceros y nobles sentimientos los conquistadores…
Es la hermosa metáfora que entrañan la novela y el filme para la sofisticada y falaz sociedad del momento…
François Damiens, actor belga de muy buen carácter, por accidente del azar -dado que estudió comercio internacional-, se hizo popular filmando programas televisivos con cámara oculta, a los que él, llegó, primero, como víctima propicia y conejillo de indias…
Tras esas primeras experiencias en el mundo de la imagen, pasó al cine en cuyo medio ha intervenido en una treintena de películas. Parece ser nunca ha obtenido un gran premio cinematográfico; pero eso sí, siempre los mayores aplausos de los festivales donde se presentan los filmes en los que interviene. Su benevolente carácter ha quedado patente en filmes como: Cowboy, Matrimonio sorpresa, El rompecorazones, Tango gratis, Asterix y Obelix

¡Enhorabuena a los hermanos Foenkinos, por sus gratas y deliciosas obras…!

Francisco Montero.